Al ubicarse en una cuenca cerrada que abarca al Estado de México, Hidalgo y Tlaxcala, la CDMX sufre inundaciones desde tiempos del imperio Mexica.
Los lagos de Chalco, Xochimilco y Texcoco eran los principales causantes de repentinas inundaciones en lo que hoy es la CDMX.
Se calcula que, para 2080, la temperatura de la ciudad habrá aumentado varios grados y la cantidad de lluvia disminuirá un 20%.
Además, la falta de agua potable se agravará considerablemente.
Por falta de agua potable, se extraerá más agua de los mantos subterráneos causando que la ciudad se hunda cada vez más.
Entre menos agua potable hay, irónicamente, más se inundará la ciudad.
Alcaldías con mayor riesgo
de inundación
El 60% del territorio de la CDMX ya presenta un riesgo muy alto de inundación en temporada de lluvia.