¿Te has preguntado por qué cuando navegas en internet parece que siempre ves lo que te interesa o lo que ya habías buscado antes?
Esto se debe al filtro burbuja.
¿Qué es el filtro burbuja?
El término fue acuñado por el activista Eli Pariser en 2010 y se refiere al sesgo algorítmico que distorsiona o limita la información que un usuario ve en Internet.
Este sesgo es causado por los algoritmos que utilizan los motores de búsqueda, las redes sociales y los especialistas en marketing para personalizar la experiencia del usuario.
El objetivo de la personalización es presentar al usuario la información más relevante posible. Pero también puede causar una visión distorsionada de la realidad.
El filtro burbuja prioriza la información en la que el usuario ya ha expresado interés.
El filtro burbuja afecta la publicidad, las fuentes de noticias y las búsquedas.
En otras palabras, aíslan a la persona de las influencias externas y refuerzan lo que ya piensa.
El filtro burbuja contribuye a la falta de comprensión y la falta de voluntad para considerar puntos de vista opuestos e información desfavorable al punto de vista
del usuario.
¿Cómo lidiar con el filtro burbuja
y los algoritmos?
Se recomienda revisar periódicamente la privacidad y la configuración de búsqueda personalizada de los navegadores y redes sociales.
Sobre todo, ampliar los horizontes de búsqueda, cotejar fuentes y consultar diversos medios para poder tener más herramientas a la hora de consumir información en Internet.